domingo, 12 de abril de 2015

Oh Aleph

Han sido unas cuantas noches en vela, aún creo que hay algo que puedo aprender de esto. Fue una noche de Diciembre cuando una primera interacción sucedió. He dejado de escribir inteligiblemente para escribir como quién ha perdido la razón. Sí, creo haber perdido la razón, y esa era la más grande muestra de que aquello no era como cualquiera. Después de tanto tiempo había deseado tener a alguien por mucho, había querido ser más que solamente la mitad de uno.

Las noches habían cambiado, no eran más un ritual hedonista sobre el día. Era un momento para compartir lo que fluctuaba, lo que ganaba, lo que perdía, lo que quería. Lo quería a él, lo quería sin duda. Quería que él estuviera en cada sujeto y predicado presente, activa o pasivamente, tácita o explícitamente.

Había compartido pensamientos, había hablado sobre defectos, sobre aspiraciones, sobre métodos, sobre secretos, había hablado demasiado, lo que con desesperación faltaba eran momentos. Los recuerdos son unión de significantes momentos, construidos mediante una comunicación/interacción bilateral en la que ambas partes forman parte activa simultáneamente. ¿Habían sido solamente un montón de palabras? Creer que no quiero.

He llegado a pensar que es probablemente un deseo estético, una búsqueda de satisfacción lúdica transitoria que es en tanto no hay presente una fuente que represente mayor utilidad. ¿Por qué lo he llegado a pensar? Porque ya no estás, porque te has desvanecido, lo has hecho, como lo temía al principio.

Había querido negarme, había querido evitarte. ¿Por qué no lo hice? Si estaba en tiempo, estaba en el tiempo, estabas fuera de mi tiempo, he perdido la concepción del tiempo.

Había tenido dentro de mí Entendimiento conceptos y categorías ligados a tu antes desconocido ser, conceptos que no habían sido conocimiento en tanto no había tangibilidad que le representara para poder ser sintetizados, por mi sensibilidad. Había sintetizado, pero no lo suficiente para poder formar un juicio completo, no te supe entero. Es probable que sea una ilusión trascendental, cayendo en alguna falacia respecto a la categoría que había estado relacionándote, a ti como predicado, conmigo como sujeto. Eras la representación en el Espacio que permitió unirse al Tiempo, permitió hacer tangible a aquel punto que contiene a todo el universo.

Tal vez no vuelva a verte, tal vez no te olvide jamás. Tal vez ya lo hayas olvidado, tal vez incluso yo lo olvide y me olvide, inclusive. 

sábado, 21 de marzo de 2015

Ppspsepseupseudo



¿Qué es la anormalidad?
Tratando de catalogar como singulares a todos aquellos que son similares.
¿Se puede ser anormal cuando tienes afines?
Me pregunto quién les habrá compartido tal ideal.
¿Quién ha dicho que no es más como había sido?
Ser en el tiempo implica no ser perpetuo.
¿Es la anormalidad diferencia con el yo-pasado, el yo-deseado o los yo-externos?
Ser como yo-pasado es un estancamiento evolutivo, a menos que haya alguna disfuncionalidad.
Ser como el yo-deseado imitaría a una idea preexistente, no más singularidad, no más anormalidad. El proclamar ser ajeno a sí mismo no sería cuerdo.
Ser como el yo-externo es tan aversivo para los pseudodiferentes que encontrar alguien con un ideal similar les hace sentir aún más singulares, lo cual es ilógico. Inclusive, para sentir aversión a lo conocido es necesario tener una concepción medianamente clara de lo externo, lo cual implica algún tipo de conexión. 
Estamos atados a la coexistencia, tanto material como espiritual. Semejanza de ideas, de estructuras, comportamientos, reacciones, de formas de vida. 
(No trato de decir que todos los entes somos intersecciones completas, pero no carecemos de algún porcentaje de ella).

domingo, 18 de enero de 2015

No ser

Cuatro de la tarde, como cuando te conocí
Caminaba situada entre las nubes, flotaba sobre ondas de calor
Estabas lejos e intacto, tan fuera de mis manos 
Había hablado, nadie había escuchado

¿Era tan fuera de lugar solo estar? 
Dejaste de escuchar, o quizá de escucharme 
Quería solo no volver a ser un desconocido
Quería pausar la eternidad. 

miércoles, 31 de diciembre de 2014

Siendo menos de lo que quieres
Soñando ser más de lo que tienes
Dar es contrario a recibir
Recibes cuando alguien quiere dar
Das cuando alguien quiere recibir 
Aquel fenómeno oculto de homogeneidad 
Todos le anhelamos y odiamos

Quiero tener de ti y tú te has cansado
Quieres dar y nadie quiere recibir
Quieres más y ahora que has desaparecido 
Ya no queda más por discutir

Efímeros sueños, caídas largas
Largas noches, interacciones efímeras 
Un ciclo sin fin

jueves, 28 de noviembre de 2013

Cuándo

Sólo quiero mirarte, cuando todos desaparezcan ante mis ojos.
Sólo quiero hablarte, cuando todos despierten en sueños.
Sólo quiero tenerte, cuando todos ante mi se encuentren vaciamente desapercibidos.
Sólo quiero sentirte, cuando todos yazcan inmóviles.
Sólo quiero ser parte, de algo inimaginable, de algo infalible, de algo inexistente.

lunes, 29 de julio de 2013

E.S.

Era la puesta segunda cuando mi corazón saltaba sin cordura 
¿Llegaría? Era mi gran duda. 
Cuanto tiempo habría pasado sin haberle encontrado, 
mis ojos necios buscaban por tantos lados 
La misma turbulencia desde el alfa, 
no era su culpa, era mía por la situación en la que vivía.
Eran mil novecientos cincuenta y cuatro días, 
la reacción no podría ser la misma. 
Le invitaría a bailar, tal vez a saltar e incluso gritar; 
no quiso gozar, era la único que podía procesar. 
Nadie puede alimentar sus días de recuerdos, 
necesidad hay de crear nuevos . . . 

No estabas, no estuviste; no estarás.

miércoles, 5 de junio de 2013

Quisiera no desear, quisiera no pensar, quisiera no querer para poder quererme. Eso lo solucionaría, quiero creer. ¿Creerlo lo hará verdadero? ¿O sólo será una vanidad más de mi querer?